+40 ideas para cenar: ¡Croquetas y mucho más!
A ver, seamos sinceros. Todos hemos estado ahí, sin ideas para cenar. Ese momento en el que abres la nevera, te quedas mirando fijamente como si las verduras fueran a empezar a bailar el “Despacito”, y dices dentro de ti: “¿Y ahora qué ceno?”. Que sí, que no es el fin del mundo, pero vaya drama existencial nos montamos.
Entre las ganas de comer algo rico, el cansancio del día, y la pereza de ponerte a cocinar, elegir la cena puede convertirse en una misión más difícil que elegir qué ver en Netflix. Pero oye, no estás sol@ en esto, aquí te traigo la solución. Spoiler: ¡croquetas! jajaja y algunas cosillas más.
La eterna disyuntiva de no tener ideas para cenar
Elegir qué cenar debería ser fácil, pero no lo es. Aquí entran en juego varios factores: el hambre (que no siempre es proporcional a las ganas de cocinar), la nevera (que parece un desierto aunque esté medio llena), y el tiempo (que siempre parece escasear). Además, está la cuestión de la variedad: nadie quiere repetir las sobras de ayer… a menos que las transformemos en algo increíble. ¿Cómo qué? Como croquetas jajaja. Porque aquí no se tira nada, y menos si puede terminar crujiente y cremosa.
La cena es el momento en el que por fin te relajas, te sientas con la familia, pareja o contigo mismo, y necesitas algo que sea reconfortante pero no pesado.
Qué debe tener una buena cena: nutrientes y equilibrio
Antes de meternos de lleno en las ideas, hablemos un poco de lo que hace que una cena sea realmente buena:
Ligera pero nutritiva: Nada de acabar con una siesta nocturna en el sofá antes de terminar de cenar. Platos equilibrados con proteínas (pollo, pescado, tofu), carbohidratos complejos (arroz integral, patatas, y sí, las croquetas cuentan), y vegetales frescos son la clave.
Fácil de digerir: Porque la noche es para descansar, no para sentir que llevas un ladrillo en el estómago.
Sabrosa y variada: Comer sano no tiene por qué ser aburrido, y con un poco de creatividad (y croquetas), puedes conquistar cualquier paladar.
Así que, cuando pienses en la cena, intenta incluir alimentos que te nutran pero que no te compliquen la vida. Y hablando de cosas fáciles y rápidas…
Ideas para cenar con platos sencillos en menos de 20 minutos
¿Tienes hambre, cero ganas de cocinar y menos tiempo del que tardas en escribir “pedido a domicilio”? Estas recetas rápidas son para ti:
Croquetas exprés: ¿Sabías que con unas croquetas congeladas de calidad puedes montar un plato gourmet? Solo necesitas acompañarlas con una ensalada fresca o unas salsas caseras (mostaza y miel, alioli de ajo negro, ¡tú decides!). Para esto, siempre viene bien tener croquetas congeladas que puedes preparar previamente o pedir en la web de Solo de Croquetas.
Wrap de pollo: Coloca unas tiras de pollo calentitas en una tortilla de trigo, añade espinacas, tomate y un poco de hummus. Enrolla y listo. Cena en 5 minutos.
Sopa de verduras rápida: Usa un mix de verduras congeladas, caliéntalas con caldo y añade un toque de especias o hierbas frescas. Cena ligera y calentita.
Ensalada de atún y aguacate: Mezcla atún, aguacate, tomate y hojas verdes con un aliño sencillo de aceite de oliva y limón.
Tostadas de aguacate y huevo: Tuesta pan integral, coloca aguacate aplastado, añade un huevo a la plancha y espolvorea con sal y pimienta.
Pasta con ajo y aceite: Hierve pasta y saltea con ajo laminado en aceite de oliva. Puedes añadir perejil o queso rallado si tienes en la nevera.
Pizza rápida en sartén: Usa una base de tortilla de trigo, añade salsa de tomate, queso y los ingredientes que quieras. Calienta en sartén hasta que el queso se derrita.
Arroz salteado: Usa arroz cocido (sobras también valen), saltea con vegetales, pollo o gambas, huevo y un toque de salsa de soja. ¡Es espectacular!
Quesadilla de jamón y queso: Llena una tortilla con queso y jamón, dóblala y caliéntala en sartén hasta que se dore y el queso se derrita.
Cenas vegetarianas que enamoran
Si hablamos de ideas de cenas vegetarianas hay muchas opciones deliciosas y variadas. Aquí van algunas ideas:
Ensalada templada de quinoa y vegetales asados: Mezcla quinoa cocida con calabacín, berenjena y pimientos asados, y aliña con aceite de oliva y limón.
Tortilla de espinacas y champiñones: Una opción rápida y nutritiva que se puede disfrutar tanto caliente como fría.
Pasta al pesto con nueces: Prepara un pesto casero con albahaca, nueces, ajo y queso parmesano, y mezcla con tu pasta favorita.
Sopa de lentejas y zanahorias: Una opción reconfortante y perfecta para días más fríos.
Tostadas de hummus y aguacate: Unta hummus en pan integral tostado, añade rodajas de aguacate y espolvorea pimentón dulce o semillas de sésamo.
Ideas para cenar en familia
Cuando hay peques en casa o simplemente quieres compartir una cena divertida y deliciosa, es normal que sea más complicado elegir la mejor de las ideas para cenar pero ¡no pasa nada! Aquí tienes una lista variada para inspirarte:
Croquetas de pollo al curry suave: Un toque exótico que encanta a los niños.
Mini croquetas de queso con barquitos de verdura: Usa calabacines o zanahorias como “barquitos” para servir las croquetas. Divertido y nutritivo.
Croquetas de pizza: Sí, has leído bien. Mozzarella, tomate y un poco de orégano dentro de una croqueta. ¡Increíble!
Wraps de pollo y vegetales: Llena tortillas de trigo con pollo desmenuzado, lechuga, tomate y un poco de mayonesa ligera.
Pasta con albóndigas caseras: Prepara unas albóndigas pequeñas y sírvelas sobre pasta con salsa de tomate.
Tacos de pescado: Usa filetes de pescado empanizado o a la plancha con una ensalada de col y una salsa ligera de yogur.
Mini pizzas personalizadas: Deja que cada miembro de la familia decore su base de pizza con los ingredientes que prefiera.
Brochetas de pollo y verduras: Ensarta trozos de pollo, calabacín, pimiento y champiñones, y cocínalos a la plancha. Puedes usar todas las verduras que quieras.
Huevos rellenos con aguacate: Mezcla la yema cocida con aguacate, un toque de limón y rellena las claras. Acompaña con una ensalada fresca, unas patatas o un poco de pan.
Cenas románticas sin complicaciones
¿Quieres sorprender a tu pareja pero no quieres pasar horas en la cocina? Aquí tienes algunas ideas sencillas y deliciosas para una velada inolvidable:
Croquetas de setas y trufa: Elegantes y con un toque gourmet. Acompáñalas con una copa de vino y una ensalada sencilla.
Tabla de croquetas variadas: Sorprende con una selección de sabores: jamón, chorizo, queso de cabra, pimiento del padrón, ¡y hasta brownie para el postre! Y si no quieres prepararlas en casa, siempre puedes pedir tus favoritas de Solo de Croquetas, las tendrás listas en menos de 15 minutos.
Risotto de champiñones: Cremoso y lleno de sabor, perfecto para una cena acogedora.
Salmón al horno con eneldo: Simple pero sofisticado, sírvelo con espárragos al vapor.
Tartar de atún con aguacate: Una opción fresca y elegante que impresiona siempre.
Ensalada de queso de cabra con frutos secos y miel: Ideal para empezar tu cita con algo ligero.
Brochetas de langostinos con un toque de lima: Acompañadas de una salsa ligera de yogur o un poco de alioli.
Con estas ideas para cenar en una cita, tu cena quedará tan bien que parecerá sacada de un restaurante con estrella Michelin (pero sin el precio).
Croquetas clásicas reinventadas
Las croquetas son como los vaqueros: nunca pasan de moda, pero siempre hay nuevas versiones y si hablamos de ideas para cenar, aquí tienes mucho para experimentar. Algunas ideas para reinventar las clásicas:
Jamón ibérico y parmesano: Porque el clásico puede tener un giro sofisticado.
Croquetas de bacalao y naranja: Un contraste de sabores que sorprende.
Croquetas de espinacas y queso de cabra: Para quienes buscan una opción intensa y cremosa.
Croquetas de cecina con queso gorgonzola: Un maridaje perfecto entre la potencia de la cecina y la suavidad del queso, es uno de los sabores favoritos de nuestros croqueter@s.
Ideas para cenar croquetas y aprovechar sobras
Uno de los mayores atributos de las croquetas es su capacidad para transformar sobras en un plato increíble. ¡Toma nota de estas ideas para cenar!
Pollo asado: Desmenuza los restos de pollo y mezcla con bechamel para croquetas irresistibles.
Pescado: Cualquier pescado cocido, desde merluza hasta salmón, puede convertirse en una croqueta cremosa.
Verduras al horno: Tritura las sobras de verduras asadas y añade un toque de nuez moscada para realzar el sabor.
Lentejas o guisos de legumbres: Una opción sorprendente y muyy rica; mezcla con bechamel y especias.
Carne guisada: La carne mechada se transforman en croquetas llenas de sabor.
Calabaza asada: Aprovecha los restos de calabaza para unas croquetas dulces con un toque de canela.
Setas salteadas: Unos champiñones o setas sobrantes pueden dar lugar a unas croquetas gourmet de otro nivel.
Arroz con leche: Sí, hasta los postres tienen cabida. Convierte ese arroz con leche sobrante en croquetas dulces y crujientes.
Cenas temáticas de croquetas
¿Y si organizas una “croque – quedada” con amigos o en familia? Prepara diferentes sabores, pon unas salsas variadas, y deja que cada uno elija su favorita. En Solo de Croquetas, tenemos opciones para todos los gustos, desde las clásicas hasta las más innovadoras. ¡La forma perfecta de disfrutar!
Así que la próxima vez que abras la nevera y pienses “¿Y ahora qué ceno?”, ya sabes la respuesta. Croquetas. Son rápidas, versátiles, y con un poquito de creatividad, pueden ser el plato estrella de cualquier cena. Ahora, cuéntame, ¿cuál será tu próxima croqueta favorita? 😊